Festival de Cannes: "Câini (Dogs)" de Bogdan Mirica

Con semejante título uno ya podría esperar cualquier cosa. Desde una película de maltrato animal a una de bandas. Tampoco uno iría desdencaminado, algo de todo eso hay.

Bogdan Mirica presenta en su opera prima un paisaje digno de western pero con el paisaje rumano. Sus protagonistas: un chico de ciudad que hereda 550 hectáreas de campo de su padre y los empleados del lugar.

Desde el primer momento, el realizador filma el campo con un halo de misterio, cuando no es más que un campo de secano. Y poco a poco aparecen los personajes que lo habitan. Hombres de campo, el que han trabajado toda la vida y que, por tanto es suya. Por eso, la llegada del nuevo "amo" se convierte en una amenaza para ellos.


De manera pausada, languida, pero tensa la violencia se hace omnipresente. Las caras, los silencios, las luces de unos faros de coche se vuelven en una amenza. La llegada del otro, el de ciudad, el extranjero, el que lo tiene todo... el odio al propietario, al que dispone de tierras... Todo es una alegoria de la violencia real de una Rumania que aun no ha cerrado sus heridas, dolida por haberse "vendido al otro", por el sometimiento, por una historia viva y aun presente.

Mirica demuestra en todo momento que es dueño total de la puesta en escena, que contrala el ritmo y la tensión de su película y de sus personajes. Y tras una gran elipsis al final, el aparato engranado parece tambalearse, hace dudar si el cineasta es capaz de resolver adecuadamente la historia o es todo intencionado. Pero lo que parece claro es que Murica apunta maneras con Câini.

Trailer: (aun no disponible)

(Faltas de ortografia por no tener teclado para castellano)

Comentarios

Entradas populares de este blog

'The brutalist', una impresionante película a nivel visual que desbarranca

'La habitación de al lado': tras el rastro de Almodóvar

'Escape', una película 100% 'cortesiana'